Presentación del Proyecto “Xabaca”. Apoyando a las creadoras árabes frente a la censura

13/04/2017
Presentación del Proyecto “Xabaca”. Apoyando a las creadoras árabes frente a la censura

El pasado 29 de Marzo se presentó oficialmente en la sede del IEMed el Proyecto Xabaca, proyecto liderado por Novact, Fundación Al Fanar y Jiwar.
Xabaca ha nacido con la voluntad de apoyar a las mujeres árabes creadoras, tanto en su papel de transformadoras de la sociedad a través del arte como contra la opresión que a menudo se enfrentan, en sus países de origen, por ser artistas y mujeres.

Durante la presentación, que duró alrededor de dos horas, estuvieron además de las 4 artistas seleccionadas en esta primera edición , Émilie Vidal (IEMed-FFEM), Aixa Drammeh (Espai Avinyó) y Thais Bonilla (NOVACT) que introdujeron y contextualizaron el proyecto para el numeroso público que superaba el centenar de asistentes.

Las 4 artistas seleccionadas para el proyecto (de un total de 140 candidaturas) fueron el foco de la sesión presentando su trabajo y explicando su vinculación al Proyecto Xabaca. La primera de ellas en intervenir fue el dúo formado por las cineastas marroquíes, Houda Lakhdar y Sofia Aissaoui. Después del visionado de su corto de 12 minutos, ‘Zahra’ donde se trata, con un formato muy sobrio, la condición de la mujer en la sociedad marroquí, las artistas se definieron como activistas que buscan dar voz a aquellas personas que ahora no la tienen. En cuanto a la posible influencia del arte tradicional islámico y la religión en el proceso creativo, comentaron que, bajo su punto de vista, la espiritualidad puede resultar positiva para el actual proceso creativo.

La siguiente en presentar algunos de sus recientes proyectos fue la ilustradora tunecina, Farah Ben Mansour. Sus inicios se produjeron a través del urban sketching de la capital tunecina en la revista participativa ‘Journal de la Medina’ focalizándose en los cambios que sufría la ciudad conforme iba desarrollándose. A partir de ahí, continuó explicando sus últimas obras que han estado más centradas en la mujer como: ‘I’m not here’ con la que intenta romper la necesidad de perfección de la mujer; ‘Arab Divas’ donde retrata figuras femeninas culturales del mundo árabe; ‘Fusion’ a través del cual intenta proyectar los sentimientos profundas que una persona puede llegar a sentir en situación de extrema soledad; ‘Harem’ como tributo a la belleza y al amor árabe. Ahora, y a partir de la experiencia ‘Xabaca’, está llevando a cabo un nuevo proyecto que consiste en recorrer los lugares públicos de la ciudad de Barcelona y preguntarle a las mujeres sobre sus sueños y ambiciones; y captar esos momentos plásticamente.

La tercera en exponer fue la artista visual libanesa, Fatima Mortada, quién desarrolló sus estudios en el Reino Unido y se caracteriza por su eclecticismo en el uso de las artes. Algunas de sus obras más destacadas son de abierto carácter sexual cosa que les había provocado algunos problemas para exponer en Líbano. Explicó que esto era producto de la sociedad patriarcal donde el desnudo se entiende como algo nocivo para la moralidad de la sociedad. Entre otros materiales, mostró obras pictóricas, otras hechas con hilo y esculturas realizadas con materiales blandos, lo cual desafía el convencionalismo que impone los materiales dichos nobles a tal arte.

Finalmente, la cantautora palestina nacida dentro del estado de Israel, Haya Zaatry, la más joven de todas, explicó que su obra está altamente influenciada por la búsqueda de la identidad, dadas las circunstancias específicas que se dan en su país; y dijo estar muy agradecida al proyecto que le había permitido conocer a otras artistas de alto nivel fuera de Palestina. La sesión concluyó con su actuación en directo en la que interpretó sus canciones ‘Borders and Promises’ y ‘Manakir’, esta última sobre aquellas personas que van a contracorriente de la sociedad.

Las cuatro artistas destacaron que políticamente ha habido una cierta apertura en cuanto a la libertad de expresión artística se refiere, especialmente después de las primaveras árabes; pero que, sin embargo, un poso de censura social se mantiene y que aún hay mucho en lo que avanzar.

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