Las mujeres de RUWOMED: Historias de resiliencia

17/05/2017
Las mujeres de RUWOMED: Historias de resiliencia

Desde 2012, ACPP, PARC (Palestinian Agricultural Development Association) y CRTD-A (Collective for Research & Training on Development-Action) han trabajado con el objetivo de apoyar al empoderamiento económico de las mujeres en Palestina y Líbano como medio para promover que ese empoderamiento lo sea en el sentido más amplio de la palabra, y también para apoyar a la resiliencia de comunidades frente a la Ocupación y los conflictos. Lo han hecho construyendo sobre las capacidades y los conocimientos ya existentes de las mujeres, y sobre su motivación para trabajar juntas con otras mujeres para superar las dificultades a las que se enfrentan colectivamente.

Y es que las dificultades son múltiples, resultado de factores tanto estructurales como puntuales, algo que RUWOMED ha mostrado muy de cerca: de 2012 a 2016 han pasado por una guerra en Gaza en el verano de 2014, la mayor crisis de refugiados de la historia, y el derrame de la guerra civil siria en Líbano. Sin embargo, lo que realmente no ha dejado de impactar e inspirar durante estos años ha sido la infatigable resiliencia mostrada por las mujeres palestinas y libanesas ante adversidades sociales, económicas y políticas constantes.

En el caso palestino, “El reto de esta zona en Palestina es existir, disponer del agua suficiente para cultivar nuestras tierras y preservarlas de la confiscación para los asentamientos Israelíes”, nos cuenta Rabia Kassab, con la mano puesta en su vientre. Viene en camino su séptimo hijo. Rabia vive en la pequeña aldea agrícola de Al Jiftlik, en el corazón del valle del Jordán, un área de gran interés estratégico para el Estado israelí, dado su microclima, sus recursos hídricos y su ubicación a lo largo de la frontera con Jordania. Es un área emblemática de la Ocupación – marcada con asentamientos israelíes construidos sobre las tierras confiscadas a agricultores palestinos y regadas con recursos hídricos a los que los palestinos no tienen acceso – y de la desigualdad sistemática que existe entre los colonos israelíes y la población palestina.

Bajo esta realidad, Rabia, junto a otras mujeres y con el apoyo de RUWOMED, han montado su propio invernadero para la producción de hortalizas. “Quizás podamos dar trabajo a otras mujeres de la zona en el futuro”, añade su compañera, Munira Daraghma. “Puede ser un paso muy importante para muchas mujeres que trabajan en los asentamientos israelíes, ya que si hay trabajo en Al Jiftlick o alrededores volverán aquí y dejarán de trabajar en los asentamientos”, explica.

Con este proyecto se han apoyado las actividades económicas de nueva creación de más de 100 mujeres en Cisjordania, y fortalecido las actividades ya existentes de 50 mujeres en la Franja de Gaza. En Líbano, se ha reforzado las capacidades de producción y comercialización de 400 mujeres cooperativistas miembros de la cooperativa de segundo grado, Namlieh, y se ha apoyado a las actividades generadoras de ingresos de 5 grupos de mujeres refugiadas palestinas y sirias.

También se ha propiciado encuentros entre ellas, participando en ferias y seminarios en España y Jordania. RUWOMED fue uno de los tres proyectos seleccionados por la UE para exponer en la conferencia NextMed que tuvo lugar en Bruselas en 2015, y elegido por el programa ENPI para presentarlo en la sede del Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación (MAEC) en Madrid, como ejemplo de un “proyecto de éxito” ejecutado por una ONG española.

"RUWOMED no quedará como una experiencia aislada en el tiempo. Las mujeres que lo integran han inspirado, con su determinación y su dignidad, nuestra apuesta por la continuación de este labor, que ocupa buena parte de nuestro trabajo actual en Oriente Medio y que aspiramos a ampliar a más países de la Cuenca Sur Mediterránea en los próximos años", apuntan desde ACPP.

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